a hostilidad a la actividad comercial y a la figura del empresario (capitalista desalmado) se puede rastrear hasta los griegos. Aristóteles condenaba el lucro o la “crematística”, aunque defendió la propiedad privada (a diferencia de su maestro Platón). La Iglesia por muchos años condenó el interés y hasta nuestros días quedan resabios de aquel discurso, ahora contra el sistema capitalista. Santo Tomás de Aquino se mostró, no como otros clérigos, más favorable hacia la actividad comercial y el beneficio del mercader, entendiéndolo como un estipendio por el trabajo realizado y los riesgos asumidos por el mercader.
3/4-Reflexiones sobre el Liberalismo: colectivismo e individualismo (por Jan Doxrud)
En este escrito abordaré el tema del colectivismo, de manera que en primer lugar examinaré este concepto para dejar en evidencia que es uno potencialmente peligroso para una sociedad dada. En segundo lugar examinaré el concepto de individualismo que es la postura defendida por el liberalismo. Con esto pretendo desmontar aquella falsedad que nos dice que el colectivismo promueve la solidaridad entre las personas y que el individualismo sería sinónimo de atomización social, egoísmo e indiferencia.