17) ¿La democracia en retroceso? (por Jan Doxrud)

De acuerdo a Applebaum el autoritarismo no es patrimonio de la derecha o de la izquierda, y su rasgo central consiste en no tolerar la complejidad (y podemos añadir la incertidumbre) y ser antipluralista. Junto con esto, la personalidad autoritaria – en palabras de Stenner – necesita de la unidad e igualdad “oneness and sameness”)

Esto lo podemos ver reflejado en figuras como la del fallecido Hugo Chávez (recordar el “Chávez somos todos”), un Rodrigo Duterte en Filipina, un Donald Trump en Estados Unidos y Ley y Justicia en Polonia. Siguiendo a la autora, estamos ante una “nueva derecha” que no quiere conservar ni preservar nada de lo existente. En el mismo ensayo mencionado, Stenner afirma que la democracia liberal ha excedido la capacidad de muchas personas para tolerarla.

El resultado es el peligro del advenimiento de un Estado Antiliberal Unipartidista (EAU), que es lo que ha estado sucediendo los últimos año en Polonia o en la Hungría de Viktor Orban. Se puede leer en el “Hungary Today” (2021) que el primer ministro Orban declaró que la democracia liberal se había transformado en una ”no democracia liberal” lo que significa que incluye el liberalismo, pero no incluye la democracia. Orban acusaba a los liberales de querer estigmatizar a los conservadores y los demócratas cristianos", por medio del uso de la “corrección política”. Continuando con el EAU, éste es descrito por la autora como un mecanismo para mantener el poder. Quizás uno de sus padres fundadores fue el bolchevique Vladimir Lenin. Elk Estado unipartidista de Lenin – escribe Applebaum – no solo era antidemocrático, sino que anticompetitivo y antimeritocrático. A esto añade la autora:

“El menosprecio que sentía Lenin por la noción de un Estado neutral, unos funcionarios apolíticos y una mínima objetividad en los medios de comunicación constituía también una parte importante de su sistema unipartidista. Así, escribió que la libertad de prensa era en realidad una patraña; se burlaba de la libertad de reunión como una frase vacía, y en cuanto a la democracia parlamentaria en sí misma, no era más que una máquina para la opresión de la clase obrera”.

Sumado a lo anterior – y como lo comentamos anteriormente – ya no existen adversarios políticos, puesto que estos se transforman en verdaderos enemigos existenciales que hay que eliminar, como el enemigo de clase del comunismo o el enemigo racial del nazismo. Como comenta Applebaum, en Hungría se utilizan teorías conspirativas como aquella que dota de un gran poder al millonario inversionista George Soros quien es artífice de un plan de promover un flujo migratorio hacia Hungría lo cual significaría un peligro para la “identidad húngara”.

Pero este miedo al inmigrante no es solo un fenómeno húngaro y el común denominador de este miedo no es meramente económico sino que, como apunta Applebaum, es un “reto existencial”. Incluso en el ya mencionado fatal accidente, el gobierno optó por desarrollar una teoría conspirativa o, al menos, alternativa a la oficial. De acuerdo a los registro de la caja negra los tripulantes del avión habrían sido forzados a aterrizar en lugar de desviarse. Incluso intervinieron asesores, quienes entraron repetidas veces a la cabina, así como también el jefe de la Fuerza aérea. El hermano gemelo optó por buscar otras explicación para la muerte de su hermano y sus acompañantes. Apuntó tanto a Rusia como al antiguo gobierno que en era en ese momento oposición. Sobre esta mentalidad conspiracioncita propio de estos líderes autoritarios, señala Applebaum:

“El atractivo emocional de una teoría conspiranoica reside en su simplicidad. Explica fenómenos complejos, da razón del azar y los accidentes, ofrece al creyente la satisfactoria sensación de tener un acceso especial y privilegiado a la verdad. Para quienes se convierten en guardianes del Estado unipartidista, la repetición de esas teorías conspiranoicas también trae otra recompensa: el poder”.

En Estados Unidos tenemos el caso de “QAnon” nombre deriva de una un usuario “anónimo” de 4Chan cuyo nombre era “Q Clearence Patriot” y que, supuestamente pertenecía al servicio de inteligencia. De acuerdo a este conjunto de teorías Estados Unidos estaría siendo gobernados por una élite de pedófilos que conspiran contra Donald Trump. Por ende tenemos a este Deep State que es una suerte de Estado dentro del Estado gobernado por una élite que tiene intereses y una agenda en común. También tenemos a Nicolas Maduro y sus recurrentes ideas de que el mundo conspira contra la economía Venezuela e incluso quer hubo una detrás de la muerte de Chávez.

https://www.elmundo.es/papel/historias/2021/01/07/5ff6e8bcfc6c832d508b45ca.html

En Hungría tenemos el “Plan Kalergi” de partidos de derecha en contra de la Unión Europea. El nombre proviene de político austriaco Richard Coudenhove-Kalergi (1894-1972), partidario del paneuropéismo o la unidad europea (precursor de lo que muchos años después sería la Unión Europea). Como podemos leer en la BBC, se trata de una conspiración consistente en un complot internacional organizado por las élites políticas y económicas para importar millones de trabajadores de Asia y África y mezclarlos con las "razas europeas".

Un libro que ayudó a difundir esta idea fue “Adios Europa. El plan Kalergi, un racismo legal” (2005), escrito por Gerd Honsik (1941 -2018), un escritor, poeta, neonazi y negacionista del Holocausto. El autor plantea la existencia de una conspiración judeomasónica que busca contaminar la “raza europea”. El libro de Honsik se divide en 21 cartas donde aborda diversos temas. En el mismo libro culpa a Coudenhove-Kalergi de ser quien estaba a la cabeza de la conspiración que amenaza la subsistencia de los pueblos de Europa.

Esta mentalidad conspiracionista se mezcla con una concepción rígida u osificada del concepto de identidad, en el sentido que no bastaría “ser” húngaro o polaco, sino que también hay que “parecerlo”. De ahí que se perciba a ciertos inmigrantes como una suerte de agente contaminante que amenaza la existencia misma de una nación. Esto se complementa con una forma de nostalgia que destaca Applebaum – siguiendo a la escritora ruso-americana Svetlana Boym (1959-2015). Tal nostalgia que puede llegar a ser perjudicial es la “nostalgia restauradora” la cual, a diferencia de la “nostalgia reflexiva”, no solo contemplan el pasado y sueña con este.

Como apunta Boym, estos nostálgicos quieren reconstruir el hogar perdido puesto que tienen una versión idealizada de este y marginan cualquier imperfección que pudo haber tenido. Ejemplo de lo anterior fue lo ocurrido el 7 de diciembre de 2022 en Alemania, en donde se desbarató un intento de golpe de Estado, lo que significó el arresto de una veintena de personas. Los detenidos era parte de un grupo denominado “Reichsbürger” o “Ciudadanos del Reich” quienes buscaban instaurar un régimen de gobierno inspirado en el Segundo Reich (1871-1919) construido por Otto von Bismarck y gobernado por la dinastía d los Hohenzollern (uno de los miembros del plan es el aristócrata Heinrich XIII de la casa de Reuss-Greiz).

En el caso de Turquía tenemos el caso del Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP), fundado por Recep Tayyip Erdoğan quien pretende convertirse en el nuevo Atatürk pero actuando en un sentido inverso. La escritora. turca Ece Temelkuran destaca en su libro “Cómo perder un país. Los siete pasos de la democracia a la dictadura” (2019) que los miembros de este partido creen ser representantes de un supuesto “pueblo real” y de estar en un plano moral superior. Sumado a esto, adoptan un enfoque conspiracionista de todo lo que acontece y tienden a distorsionar y derechamente falsear la historia.

Por ejemplo Erdogan afirmó el 15 de noviembre del 2014 que en realidad no había sido Colón quien había descubierto América sino que eruditos musulmanes en 1178. Pero no solo la historia fue víctima de las falsedades del régimen sino que también la ciencia, puesto que en el año 2017 un miembro de la juventud del AKP publicó un artículo en la página web del partido que la Tierra en realidad era plana. El mismo Erdogan ha señalado que en su opinión la evolución es solo una teoría e incluso pudimos leer en algunos periódicos que la evolución dejaría de ser enseñada en los colegios.

https://www.clubdelecturas.com/2021/08/31/resumen-de-como-perder-un-pais-de-ece-temelkuran/

https://www.reuters.com/world/leaders-turkey-syria-could-meet-peace-erdogan-2023-01-05/

Otro punto de la autora es una advertencia que ya mencionamos anteriormente y es no fiarse de estos personajes autoritarios o pensar que podrán utilizarlos a su favor (o incluso controlarlos). Temelkuran critica al filósofo esloveno Slavoj Zizek quien había dado a entender que – en el caso de Estados Unidos – si ganaba Trump, se generaría un gran despertar que desencadenaría procesos políticos que podrían mejorar la democracia. En opinión de Temelkuran, Zizek había llegado dos décadas tarde al debate con tal creencia, puesto que tal despertar nunca ocurrió y el sistema político se fue tornando cada vez más autoritario.

Erdogan, continúa explicando la autora, construyó un gigantesco entramado de lazos de dependencia, transformando gradualmente “los derechos sociales básicos en una cuestión de caridad política”. Erdogan también cuenta con apoyo de empresarios corruptos y quienes no cooperan son presionados a hacerlos o irse al exilio. En palabras de Temelkuran:

“(…) el presidente se había creado ya su propia clase de partidarios burgueses y financieros, y estos constituían lo único que necesitaba para dirigir su. farsa de democracia. Los grandes empresarios que abandonaron Turquía fueron calificados de maleantes , un término que ellos mismos habían creído durante largo tiempo que solo se aplicaba a los izquierdistas o a los anarquistas posestructuralistas”.

Incluso Erdogan ha sido explícito en rechazar pilares fundamentales de la democracia como la prensa. En un artículo de octubre de 2018 del periódico “El Mundo”, Erdogan señaló que no puede haber democracia con medios de comunicación. La razón de esto es que el “cuarto poder” no representaría la voz del pueblo por lo que se convierte en un obstáculo para la sólida labor de los funcionarios públicos que se ven presionados por los medios de comunicación.

Vemos pues que vamos encontrando rasgos comunes en estos Estados Unipartidistas Antiliberales: el desprecio por la objetividad y por la verdad, la mentalidad conspiracionista combinado con relatos que apelan e instrumentalizan emociones básicas de la ciudadanía y el anhelo de unidad social extrema que lleva a una homogeneización mental y, en algunos casos, incluso étnia. Junto con esto, estos políticos antiliberales necesitan de una camarilla de intelectuales que promuevan sus ideas y difuminen las teorías conspiracionistas. Applebaum nos relata el caso de Mária Schmidt, una historiadora húngara a la cual conocía desde hace décadas. Incluso invitó a Applebaum a la inauguración del Terror Háza en Budapest, museo que explora la historia del totalitarismo nazi y comunista en el país. En suma, tenemos a una mujer culta, con estudios y conocimientos sobre el pasado de su país y, por ende, sobre la fragilidad del Estado de Derecho y la democracia.

https://www.elmundo.es/internacional/2018/10/04/5bb5d9e1ca4741bb278b45f5.html

Con el tiempo, Schmidt comenzaría a cambiar al igual como lo hizo el sistema político de su país y se haría parte de la propaganda, difusión de mentiras y teorías conspirativas. La lección es simple y ya lo hemos mencionado: no hay que dar por sentada la democracia en el siglo XXI. Sumado a esto, tenemos que el hecho de que un país haya tenido un pasado marcado por los regímenes totalitarios, no lo inmuniza contra la posibilidad de que tales experiencias no vuelvan a repetirse en el futuro. Es en ese sentido que Applebaum escribe las siguientes líneas:

“Sin embargo, esa es la estrecha trampa nacionalista en la que Hungría ha caído hoy. El tardío ajuste de cuentas del país con su pasado comunista – construcción de museos, celebración de funerales conmemorativos, revelación de los nombres de los verdugos… – no ha ayudado a cimentar el respeto por el Estado de derecho, como yo creí que haría. Por el contrario, dieciséis años después de la inauguración del Terror Háza, el partido gobernante de Hungría no respeta ningún límite”.

Artículos complementarios:

¿Qué es la Democracia? (1): Introducción (por Jan Doxrud)

¿Qué es la Democracia? (2): Los orígenes, Grecia (por Jan Doxrud)

¿Qué es la Democracia? (3): De Madison a Robespierre (por Jan Doxrud)

¿Qué es la Democracia? (4) Siglo XX: de la esperanza democrática a la tentación totalitaria (por Jan Doxrud)

¿Qué es la Democracia? (5) Siglo XX: nihilismo secular-religioso y violencia (por Jan Doxrud)

¿Qué es la democracia? (6): hacia una definición (por Jan Doxrud)

¿Qué es la Democracia? (7) hacia una definición (por Jan Doxrud)

¿Qué es la Democracia? (8): el estado actual de la Democracia (por Jan Doxrud)

¿Qué es la Democracia? (9): palabras finales (por Jan Doxrud)

1) Constitucionalismo y Democracia (por Jan Doxrud)

2) Constitucionalismo y Democracia (por Jan Doxrud)